miércoles, 17 de agosto de 2011

Como aliviar la otitis externa

La otitis externa es una infección que se produce en la piel del conducto auditivo externo. Ocurre frecuentemente después de ir a la playa o a cualquier afluente. La causa es la humedad dentro del oído o alguna pequeña lesión en la zona, pues en un medio tan adecuado se multiplican bacterias y microorganismos.

Los síntomas frecuentes son dolor de oído, picazón, pérdida de la audición, inflamación de la oreja y sensación de zumbido o bloqueo. Es aconsejable una revisión médica; sin embargo, en casa puede realizarse un tratamiento sintomático para evitar las fiebres, combatir la infección y aliviar los dolores.

Ya que hay humedad en el área, lo más conveniente es darle un poco de calor. Se puede tomar un secador, con una temperatura tibia, y aplicar en los alrededores del oído, nunca cerca ni más de 5 minutos. Se puede poner también una almohadilla caliente detrás de la oreja, de modo que provea de calor a toda la región. También puede envolverse una bolsa de agua caliente en una toalla y luego usarla a modo de almohada, con la oreja afectada sobre ella. El calor que se genera aliviará el dolor de oído.

Un remedio de probada eficacia es poner en el oído unas gotas de aceite mineral o vegetal, que actúa como lubricante y elimina la sensación de resequedad y el escozor. Se calienta el aceite del mismo modo que lo hacemos con los biberones de los bebés, teniendo cuidado con que la temperatura sea tibia ―la del cuerpo― para no quemar el conducto auditivo. La aplicación se hace con cuentagotas, con 5 gotas bastará.
Utilice goma de mascar para ventilar la trompa de Eustaquio, lo que favorecerá el drenaje. Además se aliviará la presión que la infección suele causar sobre el oído externo. El acto de mascar durante la comida funciona de igual manera. Otra vía para reducir la sensación de tupición es beber mucha agua y jugos de frutas. Si hay algo de fiebre, probablemente le ayudará a que esta disminuya.